Leer y utilizar los manuales de instrucciones debería ser obligatorio para todas las personas que compran un electroméctio para obtener el máximo rendimiento y la mayor eficiencia energética. Sin embargo la realidad es otra:

• Suelen acabar guardados y olvidados en un cajón.
• Acaban en el contenedor de basura.
• Son etiquetados por los clientes de muy densos y aburridos.
• Se quejan de que utilizan un lenguaje muy técnico.
• En ocasiones, aparecen instrucciones en otro idioma.
• Son considerados por la mayoría de los usuarios de poco práctico, nada funcional.

Y si hablamos del impacto medioambiental... 

Dichos manuales están fabricados en papel. La producción y fabricación de papel provoca: 

• La deforestación, los incendios, la erosión.
• Destrucción de hábitats naturales.
• La extinción de especies animales y vegetales.
• La contaminación de la tierra, el agua y el aire.
• Incremento de residuos.
• Incremento del efecto invernadero, el cambio climático, las sequías…

Aunque cueste creerlo, cada año se pierden unos 15.000 millones de árboles y de continuar así, en 300 años habrán desaparecido por completo